La antropóloga Germaine Tillion, miembro de la Resistencia francesa y deportada a un campo de concentración, todavía estaba trabajando la víspera de su muerte. De vuelta de aquel horror, decidió reír hasta el último minuto, despertando a su alrededor un
La antropóloga Germaine Tillion, miembro de la Resistencia francesa y deportada a un campo de concentración, todavía estaba trabajando la víspera de su muerte. De vuelta de aquel horror, decidió reír hasta el último minuto, despertando a su alrededor un
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